domingo, agosto 19, 2007

Gobernador y empresario

En un artículo sobre el gobernador de Cundinamarca, Pablo Ardila, publicado en la revista Semana se habla del problema ‘de presentación’ que implica el hecho de que el hijo del dueño del periódico El Espacio siga dedicado a los negocios de su familia, mientras desempeña un cargo oficial. La verdad es que a mí eso no me sorprende ni poquito, ni debería sorprender a la gente de la mencionada revista, si se tiene en cuenta que ese es el ejemplo que está dando Uribe desde la Casa de Nariño. Ya es por todos conocido que desde muy temprano Uribe madruga a llamar a su ‘jinca’ a ver si los terneros están bien alimentados, si algún potro está cojo y no sé a qué otras tareas que corresponden a un capataz. Dice además el mismo artículo que lo lamentable sería que el gobernador–cazador–depredador estuviera mezclando sus negocios particulares con los asuntos de su despacho. Y aquí nuevamente hay que decir que a la luz del ejemplo presidencial eso no debería representar ningún problema, pues al fin y al cabo nadie ha dicho nada sobre los hijos del mesías, que de buenas a primeras resultaron siendo exitosos empresarios de las artesanías. ¿O es que nos van a venir con el cuento de que todo ha sido por los méritos de esos muchachos tan trabajadores, y que en nada ha tenido que ver el hecho de que sean los hijos de Uribe? En condiciones normales, en un país decente, la revista Semana tendría razón al divulgar tales inquietudes; pero en el ‘nuevo orden’ que Uribe ha implantado en el país, esto no debería clasificar ni siquiera como anécdota. La nueva moral es así. Y si Uribe lo hace, ¿por qué no pueden otros colombianos exitosos como él seguir su ejemplo? Es más: siguiendo esa misma lógica, lo ideal sería que después de que salga de la gobernación, Uribe nombre a su colega ganadero como ministro del Medio Ambiente, porque a los ojos del Presidente lo debe tener más que merecido.

2 comentarios:

  1. ..vea usted don Vladdo... usted es caricaturista y de paso bloggea.. (Cosa que muchos celebramos). Yo compongo canciones y el vicio del blogg también me seduce. Lo que me sorprende son las coincidencias que -yo como admirador- celebro con voladores al aire.
    ¡No se vuelva a perder, por favor!

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  2. Es que uno se pregunta cómo una empresita que vende pulseritas y pendejadas y que comenzó con un capital de unos 30 millones de pesos, en cuestión de unos cuantos años tiene un valor registrado ante la Cámara de Comercio por encima de los 1000 millones de pesos. De estas cosas no se habla, así como del plagio del hijo menor de Uribe en los Andes, universidad en donde para otro alumno el hecho habría sido castigado severamente.

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