Vale la pena destacar la velocidad con la que se movió el gobierno colombiano para repatriar los restos de los pensionados que murieron en el accidente por carretera en el Perú. La verdad es que en muchos casos hemos visto a la gente mendigando en las emisoras para que les ayuden a trasladar al país el cadáver de algún familiar que fallece en el exterior.
Esta vez 13 de los 14 fallecidos fueron trasladados a Colombia en tiempo récord, lo cual se le abona al ministerio de Protección Social, que con este hecho se apunta un éxito en materia humanitaria.
Al parecer, el fallecimiento de la otra persona se produjo luego de que el avión de la FAC había partido de Perú con los otros restos mortales, pero ya el gobierno anunció que también será transportado a Colombia lo más pronto posible.
En medio de la gravedad de este hecho, reconforta un poco saber que los familiares de las víctimas por lo menos pudieron contar con la solidaridad del gobierno nacional, cosa extraña en los casos en que los colombianos sufren percances en el extranjero, cuando tradicionalmente quedan abandonados a su propia suerte.
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